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Cuando los fundadores de Azalea Cultural Activities nos reunimos para crear nuestra empresa, siempre priorizamos el sentido social de la misma. Azalea debía defender con su trabajo diario y su posicionamiento como entidad los valores democráticos, así como otros valores sociales que la propia democracia lleva implícita como el respeto, la tolerancia hacia lo diferente, la solidaridad entre personas y colectivos y la empatía. 
Todo ello debía ser canalizado desde la formación y la  concienciación de dichos valores sociales a través de la educación como herramienta fundamental que trascendiera a las diferentes edades de los colectivos con los que íbamos a trabajar.
Desde Azalea nos posicionamos por tanto a favor de la lucha decidida contra lacras como la violencia de género, el acoso escolar, la exclusión social y laboral de personas con discapacidad o la brecha digital y la soledad no elegida que sufren a diario nuestros mayores.
Creemos en la accesibilidad universal en su más amplio contexto, en que los centros educativos deben impartir conocimiento a la vez que forman mejores ciudadanos, en que la atención a los mayores y a la discapacidad deben ser tomadas como verdaderos retos y no como problemáticas a resolver de una u otra manera.
Por estos motivos existimos, por estas motivaciones nos levantamos cada día y nos vamos a dormir con la gran satisfacción del deber cumplido como mayor recompensa cuando nuestras actividades han sido realizadas en colegios e institutos de España y vemos los resultados en las caras de docentes y alumnos.
Hemos nacido para trabajar por nuestros conciudadanos, crecemos para dar el mejor servicio posible y estaremos mientras seamos útiles a nuestro entorno, a la comunidad educativa al completo, al asociacionismo y a las personas en general.
Porque en Azalea, las personas son lo más importante